Varios pajareros del grupo Birdnet Murcia nos hemos echado al mar el pasado fin de semana, a bordo del motovelero Karyam, para disfrutar de un emocionante encuentro con los cetáceos y aves marinas que pueblan el litoral murciano que, como de costumbre, nos ha regalado un fabuloso viaje.
El Karyam es un motovelero turco de la empresa murciana Cetáceos & Navegación, especializada en rutas para la observación de esta valiosa fauna, que también contribuye con sus investigaciones al conocimiento sobre los cetáceos en la costa levantina.
A bordo nos recibe la tripulación, formada por el patrón Antonio Méndez y la oceanógrafa Paloma Carrasco. Al grupo compuesto por aficionados a la observación de aves de Murcia, Yecla, Almería y Cartagena se ha unido Gabriela Oms, bióloga brasileña que trabaja en investigación de cetáceos, que ha venido a España para presentar un estudio sobre las lesiones cutáneas en delfines y ballenas que encuentran en la Cuenca de Santos (Brasil) al 'I Congreso Mundial de Mamíferos Marinos (World Marine Mammal Conference – WMMC 2019)' celebrado en Barcelona del 9 al 12 de diciembre.
Paloma Carrasco ofrece a los asistentes una charla sobre los habitantes permanentementes de estas aguas, como el delfín mular, delfín listado, delfín común y el calderón común, así como otras especies que pueden observarse en función de sus rutas migratorias o que pasan cierto tiempo en esta zona del Mediterráneo, como el cachalote, el rorcual común, el calderón gris o el zifio de cuvier.
En la ruta del domingo 15 de diciembre saliendo del puerto de Cartagena a las 09:30 h se producen los primeros avistamientos, un grupo numeroso de delfines mulares rodea la embarcación y observamos las primeras aves marinas en buenos números: gaviotas patiamarillas y reidoras, cormorán grande, pardelas baleares, algunos alcatraces atlánticos, págalos grandes y una pardela cenicienta (la mayor de las pardelas presentes en Europa) que es la sorpresa ya que en el otoño abandonan el Mediterráneo viajando por el océano Atlántico hasta Sudamérica y, especialmente, por la costa atlántica africana.
El Kayarm pone rumbo al sector occidental de la costa murciana navegando frente a los acantilados de Cartagena, Mazarrón, Lorca y Águilas. Uno de los tramos mejores conservados del Mediterráneo que atesora multitud de rincones salvajes de enorme belleza y que muy pocos conocen. Cuenta el patrón, Antonio Méndez, que sus clientes, la mayoría madrileños y catalanes, llegan atraídos por la experiencia de vivir en un barco y realizar una travesía avistando cetáceos, hacer snorkel y desembarcar en calas vírgenes y acaban encandilados por la belleza de este rincón del Mediterráneo que no esperaban encontrar cuando contrataron sus vacaciones. Él, que ha recorrido navegando medio mundo, reconoce que es uno de los lugares que más le gustan y que no tiene nada que envidiar a otros puntos más conocidos de nuestro Mare Nostrum.
Durante la mañana se suceden los contactos con distintos grupos de delfines mulares, listados y comunes para el deleite de todos los allí presentes. Nos cuenta la tripulación que estamos teniendo mucha suerte, ya que todos los días no se producen el mismo número de avistamientos, la naturaleza es así… las personas que salimos habitualmente a observar fauna salvaje y a disfrutar del contacto con la naturaleza sabemos que siempre regala algún momento especial.
El avistamiento que se realiza desde Cetáceos & Navegación es respetuoso, no se da de comer a los animales y se ajusta la manera de navegar al comportamiento de los cetáceos. Es importante no molestar a los animales con el barco y poder observarlos en su medio natural. Con frecuencia ellos mismos se acercan a la embarcación buscando el contacto e incluso nadan con la ola de proa, como ha ocurrido en varias ocasiones a lo largo de la jornada. En otras ocasiones, por el contrario, nos dan a entender claramente que no somos bien recibidos, en ese momento nos alejamos y seguimos nuestro camino.
Frente a la costa del Parque Regional de Cabo Cope y Puntas de Calnegre se produce una de las observaciones más especiales del día, por un momento Gabriela y Paloma divisan un zifio de cuvier, especie muy difícil de ver en el Mediterráneo. Cuando nos avisan al resto el cetáceo ya se ha sumergido y realizamos una espera, nos cuentan las expertas que el tiempo de inmersión que realiza esta especie oscila entre 17 y 25 minutos. Con suerte saldrá en este tiempo en un radio que nos permita volverlo a ver. Con mucha ilusión el grupo rastrea con los prismáticos, pero es después de media hora entendemos que se ha alejado y seguimos nuestro camino.
Hay tiempo también para un almuerzo y un estupendo caldo con pelotas que prepara la tripulación para todos, almuerzo que es interrumpido por un grupo de delfines comunes que se acerca al barco y hacen que se vuelvan a escapar los «ooohhh» y que todos nos emocionemos.
Entre conversaciones se habla del avistamiento excepcional de orcas en la costa de Cartagena el pasado 14 de noviembre, «un mínimo de cuatro ejemplares»: un macho y una hembra adulta, una cría y un inmaduro. Paloma Carrasco nos informa de que el grupo de orcas se vio días después en la costa mallorquina y que han llegado hasta Génova donde continúan. Desgraciadamente la cría ha fallecido, se ha observado al grupo arrastrándola en aguas italianas, comportamiento documentado en esta especie, que puede llegar a arrastrar a una cría muerta durante más de dos semanas y más de mil kilómetros hasta finalizar el duelo.
El atardecer nos alcanzan a la altura de la isla de las Palomas volviendo a puerto, algunos cormoranes moñudos posados en las rocas, alcatraces y pardelas baleares volando sobre la superficie del mar y grupos de cormoranes grandes en 'formación de V' siguen emocionándonos con las últimas luces. Destacar la ausencia de álcidos, muy escasos hasta el momento esta invernada.
Y con un día de «puta madre», como diría Antonio Fuentes, al que tenemos que gradecer siempre que nos líe para hacer estas cosicas, nos despedimos en el puerto de Cartagena. Una jornada sobresaliente por la calidad humana, la profesionalidad y cercanía de la gente de Cetáceos & Navegación, y la fortuna de observar a todas estas especies en este rincón privilegiado del litoral murciano.
Susana Noguera Hernández. Naturalista
2019-12-17
Delfín saltando frente a los acantilados de Cabo Tiñoso. Imagen: Javier Palacios.
Pardela balear. Imagen: Javier Palacios.
Los pajareros de Birdent Murcia, de expedición marina. Imagen: Susana Noguera.
Pronto observamos las primeras aves marinas en buenos números. Imagen: Susana Noguera.
Delfín mular. Imagen: Javier Palacios.
La observación de delfines siempre emociona. Imagen: Javier Palacios.
Observando el horizonte, de paseo por el litoral murciano. Imagen: Susana Noguera.
Alcatraz atlántico. Imagen: Javier Palacios.
