Un nuevo estudio ha desarrollado un método más preciso para medir la población de lobos a escala regional, basado en procedimientos de captura-recaptura espacialmente explícitos y técnicas de análisis de ADN no invasivas, según informa el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), entidad que ha participado en este trabajo.

La investigación está basada en métodos espacialmente explícitos, es decir, en los que se tiene en cuenta la distribución espacial de las detecciones. Con ello, se busca solucionar los dos problemas más comunes en las técnicas tradicionales de captura-recaptura: la incertidumbre en la definición del área efectiva de muestreo y la heterogeneidad en la detección.

Los sistemas de captura-recaptura se combinan con las observaciones y seguimiento genético no invasivo a partir del análisis de heces. Así, estas modernas técnicas de análisis permiten calcular el tamaño de las poblaciones y su localización espacial.

“Creemos que la estrategia utilizada en nuestro estudio puede ser usada de manera efectiva para el seguimiento de poblaciones de grandes carnívoros como el lobo, caracterizados por requerimientos espaciales grandes y bajas densidades”, explica José Jiménez, investigador del CSIC en el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos. Jiménez defiende, además, que “la aproximación utilizada en nuestro trabajo puede ser relevante para el caso del seguimiento de poblaciones amenazadas o poblaciones sometidas a gestión, donde es necesaria una alta precisión”.

En este sentido, el lobo es una de las especies más problemáticas en las mediciones. De manera tradicional, en los estudios a escala regional se ha utilizado el número de manadas para estimar el estado de las poblaciones de la especie.

Sin embargo, los investigadores destacan que, aunque actualmente se puede medir con mayor fiabilidad el número de manadas de lobos, en ocasiones, es necesario también estimar la abundancia de la especie y no solo del número de manadas. De hecho, tras el estudio del área seleccionada en Costa da Morte (Galicia), se constató que entre el 16 y el 25% de la población de lobos no estaba ligada a ningún grupo.

En total, en el área seleccionada de estudio, se estimó que la densidad media era de 2,55 lobos por 100 km2 y el tamaño de población estimado se estableció en 111,6 lobos, con un intervalo de credibilidad entre 81,8 y 153,6 miembros de la especie.

El trabajo, que se ha publicado en Scientific Reports, subraya la necesidad de desarrollar políticas de conservación de la vida salvaje. Para ello se requiere de métodos fiables de medición de la población para alcanzar una mayor aceptación y soporte en las decisiones.

2018-02-01

  • Imagen: CSIC
    Imagen: CSIC.